Según publica ‘The Korea Times’ “Anri Suzuki obtuvo su doctorado en una de las universidades más prestigiosas de Japón con una tesis centrada en la guerra chino-japonesa en 1937, donde murieron unos 300 mil chinos, según los historiadores”
La joven japonesa aseguró que “siente un gran respeto por la historia y se niega a olvidar. Yo quiero sanar con mi cuerpo esa herida que sufren los chinos”.
“Eso sería como una compensación psicológica para ellos” y que “los estudiantes chinos la tratan más amistosamente que los japoneses”.
La doctora en historia tuvo una idea para enmendar una página de la historia de su país, y se ofrece para mantener relaciones sexuales gratis con estudiantes chinos y así disculparse por la invasión de Japón a China.